viernes, 23 de agosto de 2019

RETRATOS A PASTEL




Pastel sobre papel Canso (40 x 50 cm)
Pastel sobre papel Canso (40 x 50 cm)







Cuando hago un retrato me parece entrar dentro de la persona. Dibujando sus ojos creo adivinar sus pensamientos. Veo la foto y comparo una a una sus facciones, miro, remiro y vuelvo a mirarlo hasta encontrar la pincelada que como un toque mágico le da el parecido.
El proceso de observación es mucho más largo que el dibujo  en sí. En dibujarlo me puedo llevar un día pero la observación y retoque puede llevar al menos tres o cuatro días.
 Y al final… me parece estar unido al retratado, conocer sus pensamientos aunque nunca lo haya visto en persona .  Si es un niño, cuando lo conozco me invade un especial cariño y a veces cuando entrego el retrato  me da pena desprenderme de él.

En este caso he podido volver a tener en casa a mis padres, mirarles a diario acordarme de la mirada azul e intensa  de mi madre, de la media sonrisa un tanto burlona de mi padre, de tantos momentos vividos junto a ellos y pensar lo que les hubiera gustado verse en esos  esos retratos.
Ahora me tengo que volver a separar de ellos pero  sé que estarán allí, en el despacho de mi hermano, en familia.